Argumento
El ejercicio consistía en disponer cinco cubos con comida para el caballo; cada cubo tenía un nombre que yo mismo había puesto (Yo, esposa, hijos, trabajo y amigos). El caballo representaba el alcohol. Cuando yo lo pidiese, soltarían al caballo y mi tarea consistía en evitar que el caballo comiese de los cubos.
Resultado
CONTACTAR CON CLÍNICAS CITA AHORA
Fui a buscar el caballo y le obligué a moverse lejos de del centro, que era donde se encontraban los cubos de comida. Pero el caballo, en un giro inesperado que no controlé, se comió únicamente la comida del cubo donde estaba escrito el nombre de “Yo”.
Interacción
Pensar que yo dejé mi puesto para ir a buscar al caballo (Alcohol) y que éste sólo comió del cubo en el que yo me reflejaba (Yo).
Reflexión
En mi vida, he dejado todo lo que me importaba por el alcohol y éste se me ha comido. He dejado de relacionarme con mi entorno, he perdido un trabajo que supuestamente debía garantizar mi jubilación, he entrado en una depresión, y he podido llegar a morir si mi hijo no me hubiese rescatado del abismo en que me encontraba. Todo esto es lo que debo agradecer al alcohol y a mi ceguera frente a algo evidente a lo que no supe poner solución.
Puedes encontrarnos en la página web de Clinicas Cita
o aquí para saber más sobre terapia asistida con equinos en ClínicaCita
Autor: Comunicación Clínicas CITA