La desintoxicación hospitalaria sólo estará indicada en un porcentaje de los casos.
La desintoxicación hospitalaria con ingreso
Estos son los criterios de ingreso más relevantes:
- Alcoholmanía muy intensa: Pacientes con una fuerte dependencia psicológica del alcohol, en los cuales no hay garantías de abstinencia fuera de la clínica.
- Patología psiquiátrica asociada o secundaria al síndrome de dependencia alcohólica, que haga imprevisibles las reacciones que el paciente pueda experimentar bajo los efectos de la medicación.
- Politoxicomanías: La asociación del consumo de alcohol con benzodiacepinas, barbitúricos, estimulantes, derivados cannábicos, etc., suele impedir el tratamiento en régimen ambulatorio. En estos casos es imprescindible el abordaje simultáneo de ambas adicciones.
- Patología orgánica grave que suponga un riesgo vital en caso de síndrome de abstinencia de sobredosis farmacológica. Éste es el caso de los pacientes con insuficiencia respiratoria, cirrosis hepática, etc.
- Síndrome de abstinencia presente en el momento de iniciar el tratamiento. En estos casos, existirá siempre la indicación de ingreso urgente.
- Patología familiar grave: Es particularmente frecuente la indicación de ingreso cuando la pareja del paciente también es alcohólica. Con menor frecuencia, el ingreso está motivado por la existencia de una constelación familiar que boicotea el tratamiento de manera directa o indirecta.
- Degradación social: Ausencia de recursos socio-familiares que permitan la colaboración activa de un adulto que se responsabilice del tratamiento. Ésta es una situación típica de alcohólicos que han llegado a niveles importantes de marginación social.
Por regla general, el tratamiento farmacológico será similar al indicado en casos de tratamiento ambulatorio, y las diferencias vendrán marcadas por las medidas ambientales, el abordaje de la patología médica asociada, y dosis quizás más elevadas de medicación.
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Un caso especial y concreto lo constituye el delirium tremens por abstinencia alcohólica. Se trata de un cuadro agudo que necesita ser tratado con urgencia en un servicio médico.
El ingreso de un enfermo alcohólico para un tratamiento de desintoxicación, se puede plantear con dos estrategias terapéuticas distintas:
- Ingreso breve, exclusivamente para desintoxicación, exploración de la patología orgánica relacionada con el alcohol, valoración de la patología socio-familiar, etc.
- Ingreso más largo, done de plantea un abordaje sistematizado de la dependencia psicológica mediante grupos intensivos de psicoterapia, entrevistas individuales, grupos de familiares, etc
En uno u otro caso es fundamental que buena parte de los esfuerzos asistenciales se centren en convencer al paciente de la necesidad de un seguimiento posterior. No puede haber prisa para que el paciente modifique actitudes profundamente arraigadas. En cambio, si se consigue que siga en tratamiento, poco a poco experimentará la evolución deseada.
La desintoxicación es un momento especialmente importante en el conjunto de un programa terapéutico para alcohólicos. Conviene utilizarla para introducir en el paciente una cierta conciencia de enfermedad, a la vez que se le motiva para continuar posteriormente el tratamiento, previniéndole de esperar resultados inmediatos y espectaculares.
Autor: Comunicación Clínicas CITA